miércoles, 6 de agosto de 2014

¡Estoy enferma!



Desde hace tiempo vengo leyendo en distintos espacios el espanto, la aberración que produce en algunas personas el hecho de que hayamos otras (particularmente mujeres) que gustamos de recibir azotes en las nalgas... pero también he visto, hasta eso que con cierto agrado, el nivel de interés y cuchicheos que provocó el libro (la trilogía) de 50 sombras de Grey. Últimamente está más de moda que cuando salió el primer libro, y es que no es para menos porque está a punto de estrenarse la película... yo soy una de las que no piensa perdérsela. 

Verán, estoy de acuerdo con que no se trata de una obra digna de un premio de literatura, por supuesto que la historia es tonta y cursi hasta el hartazgo... pero Christian Grey se convirtió en puente de comunicación entre los spankos y bdsemeros con los vainilla. Personalmente no me contuve y compartí los libros con cuanta vainilla se dejó, incluidas mis hermanas y amigas... de esa forma pude notar su afinidad o rechazo para con esto que es mi vida: el spanking.

No voy a entrar en la tonta discusión acerca de si el libro es cierto en sus descripciones, si muestra o no un bdsm muy light, etc... recuerden que soy de la idea de que cada uno viva sus preferencias y gustos como mejor le plazca, hasta donde sé no hay una ley irrompible del bdsm o spanking... así que dejémonos de mojigaterías. Si el libro les gustó o no, esa es otra cosa... estoy segura que pocos de este mundillo lo aceptarán como algo relevante para la comunidad... la gran mayoría se cree el cuento de superioridad mental y psicológica porque 'somos' de mente abierta, pero son los primeros en señalar, etiquetar y desacreditar porque no está a la altura. Bah.

El punto al que quería llegar, y el cual sugirió el título de este post, es la reacción del mundo vainilla (mucho más honesta que la del mundo 'openmind' spanko y bdsmero)... hacia la forma en la que puede desarrollarse una relación, ni siquiera de disciplina doméstica, sino de juegos sexuales consensuados entre adultos, como los que describe el libro. Algunas personas se sonrojan al mencionarlo, otras sonríen pícaramente y levantan los hombros, la mayoría opinó que ¡qué aberración!... y todas leyeron, al menos el primer libro, completito. Ja!

Yo no me voy a centrar en la historia de E. L. James, autora de tan controvertidas publicaciones, sino en lo que mi imaginación y libre albedrío, en cuanto a cualquier libro, me permitieron desarrollar. Me pareció interesante la forma en la que la chica (Ana Steele) se va introduciendo al mundo 'obscuro' que representan los gustos, deseos y fetiches del hombre que le robó el corazón (¿quién puede no enamorarse de Christian Grey?... y más si gusta de los azotes. Me les caso, señores), lo cual demuestra que el amor sigue siendo una fuerza indomable, pero mejor aún, que el spanking puede terminar gustándole (casi) a cualquiera... hasta a una mojigatilla inexperta. 

Criticaría que se encasilló a Mr. Grey como un traumado, con problemas mentales y de personalidad, con telarañas psicológicas que ayudan a pensar que, obvio, con una infancia como la suya, cualquiera optaría por una vida sexual 'enferma', ¡carajo!... como si solo nosotros 'los enfermos' contáramos con características de ese tipo... Bah, de nuevo.

Sin afán de seguir revolviendo este post, solo diré que lo que cuenta 50 sombras no es nada nuevo, es solo una historia de amor que se da entre una vainilla pobretona con aires fantasmagóricos y un guapo millonario que gusta de juegos sexuales particulares... ¿vieron cómo es fácil etiquetar a la gente? 

La conclusión de mi experimento, por si no habían notado que lo fue, es que a muchas mujeres les gustaría experimentar aunque sea un poco de lo que se describió en el libro, que todas anhelan un hombre en sus vidas que las cuide, de quien sean la prioridad y quien sea capaz de hacer cualquier cosa por ellas... ¡obvio!. Que hay personas, particularmente mujeres, que piensan que la que se deje nalguear, es una tonta enferma que no tiene dignidad... aquí yo podría decir que 'pobrecitas', no saben de lo que se pierden... pero mejor diré que cada uno haga con su cuerpo, sus humedades y sus orgasmos lo que mejor le convenga, y a mí me conviene ser una enferma que disfruta cuando su esposo/spanker le da sus buenas nalgadas.

Ya quiero ver la película.

Yo Spankee

No hay comentarios: